Las mujeres argentinas nos han dado un ejemplo de lucha en las calles que creo merece la pena ser tenido en cuenta. Para ellas, mi admiración y respeto. Sé que conseguirán, al fin, la despenalización del aborto en su país y que en pocos años, se extenderá al resto del continente. Pero mientras esto pasa, no está demás sentarnos a reflexionar sobre lo que oculta en realidad la prohibición del aborto.
En latinoamérica, solo en Cuba y Uruguay el aborto es legal. Parece increíble que no se pueda ver el aborto, aún hoy, como un derecho sanitario de la mujer. Y me explicaré mejor antes de que me tachéis de cosas que no soy. No soy proabortista. Soy provida. Y es que no solo el feto es vida. La madre también es vida. El aborto creo que puede ser una decisión complicada, difícil y extrema. Y creo que si diéramos a elegir, cualquier mujer desearía no haber tenido que abortar.
Las legislaciones contrarias al aborto son extremadamente misóginas y clasistas. Las mujeres hemos abortado siempre (en el antiguo Egipto ya se practicaban abortos). Les guste a los señores que nos legislan o no, las mujeres seguiremos abortando.
Lo único que tienen que hacer esos señores que votan sobre el aborto es garantizar que la situación económica de las mujeres no suponga un riesgo para nuestra salud (recuerdo que la madre también y, sin dudas éticas posibles, es vida).
Lo que realmente hay detrás de la prohibición de abortar es el castigo a sufrir daño en nuestra salud física y psicológica por haber desobedecido las reglas morales de los señores de corbata que nos legislan. A ellos les recuerdo que también son Vida los bebés que ya han nacido: los niños que piden, los que rebuscan en los vertederos, los explotados, los abandonados, los oprimidos... si tanto aman la Vida, cuiden de ella.
Las mujeres ricas de Argentina seguirán abortando en condiciones de seguridad sanitaria. Las pobres se verán en peligro por hacerlo. Eso es todo. Prohibir el aborto no prohibe el aborto; tan solo condena a las pobres a sufrir sus secuelas poniendo en riesgo la propia salud.
Les recuerdo que la madre también es vida.

que tanta razon tienes en tus palabras,despenalizar el aborto, salva mas vidas de las que se pueden perder,al legislar nos da opcion a dar apoyo emocional y psicologico y hasta economico.
ResponderEliminarnos permitiria visualizar el motivo real que lleva a una mujer,familia o pareja a abortar y legislar sobre esa causa.pero es mejor para los señores parlamentarios esconder todo eso y culpar una vez mas a la mujer,como ser inferior y bajo el yugo del macho inteligente y racional.