Además, y dado que estoy disfrutando mucho del posgrado en salud y género, he querido que una mujer con una visión muy similar, con quien he disfrutado aprendiendo, escribiera el prólogo del libro. He tenido el inmenso placer de recibir de Carme Valls LLobet, especialista en medicina interna y endocrinólogía y Directora del Programa Mujeres, Salud y Calidad de Vida del Centro de Análisis y Programas sanitarios de Cataluña, un inspirado texto del que os ofrezco un extracto:
"El extrañamiento del propio
cuerpo acompañado de la ignorancia sobre el funcionamiento de los propios
órganos internos, ha constituido la base ideológica que ha permitido la
represión sobre el cuerpo de la mujer. El útero en especial y desde los tiempos
de Aristóteles, se ha asociado a la gran diferencia de las mujeres frente a los
hombres y considerado desde el principio como la base de la feminidad. En el
útero se arraigaba un nuevo ser durante el embarazo y la mayoría de las
dolencias de las mujeres se localizaron el útero. Esta localización en el
“histerus” acabó dando nombre a las patologías desconocidas de algunas mujeres
que convulsionaban y retorcían su cuerpo en circunstancias en que no podían
expresar claramente sus sentimientos o su dolor, ni verbalizarlo. La
denominación de histeria o de manifestaciones histéricas, ha etiquetado muchas
de las manifestaciones clínicas del cuerpo de las mujeres, que a veces reprimen
su sintomatología para ahuyentarse de un rápido y precipitado diagnóstico. El
mismo dolor menstrual cuando es intenso se ha catalogado como dolor histérico
en lugar de haber estudiado si existe alguna causa biológica que lo haya
producido, o en lugar de intentar
paliarlo con una mejor armonía del cuerpo de las mujeres.
El libro
de Mónica Felipe-Larralde nos permite introducir a las mujeres en aspectos
desconocidos del funcionamiento de sus propio cuerpo, de su ciclo menstrual y
de su útero, con una base científica y neuroendocrinológica del funcionamiento
de sus órganos genitales internos y por otras parte se introduce en los
elementos del entorno, y en las relaciones de armonía con los sonidos y los
ejercicios de relajación que nos permiten retornar a la armonía interna cuando
se ha roto por condiciones de estrés o por trastornos emocionales intensos."
Enhorabuena Mónica! y gracias por reconectar-nos.
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